sábado, 23 de marzo de 2013

Consultas ciudadanas a través del juego: Una entrevista con Camila Vera, Tato Guerra García y Luigi Valdizán


Un grupo de niños y adolescentes del Asentamiento Humano “José Carlos Mariátegui” participó en los talleres de escenarios al futuro para mostrar que es posible recoger sus percepciones y opiniones mediante metodologías creativas y no intrusivas compuestas por el juego, teatro y técnicas de clown.


El proyecto “Desafíos al 2040: Diálogos Informales para la Ciudad”, desarrollado por FORO Nacional Internacional dentro del marco del programa Agenda:Perú, conformó un equipo integrado por Camila Vera, Luigi Valdizán y Tato Garcia Guerra para realizar diferentes consultas a niños y niñas provenientes de zonas vulnerables, las cuales sirvieron para recolectar sus percepciones sobre el futuro utilizando dinámicas basadas en diferentes expresiones artísticas y métodos lúdicos. El lugar elegido fue el Asentamiento Humano “José Carlos Mariátegui” en el distrito de Villa María del Triunfo, 
en el ámbito del programa Barrio Mío, cuyos funcionarios prestaron colaboración en la organización de los talleres.


Según los facilitadores, una ventaja positiva del uso del arte y técnicas de clown, es que les permite a los niños y adolescentes expresar sus ideas de manera libre y espontánea. Mediante el uso de dichas técnicas, los participantes dan valiosa información sin presión externa, como puede ser el caso si se usan encuestas o focus groups en grupos como niños y adolescentes. Camila Vera sostiene que la autenticidad en las respuestas fue posible gracias a las dinámicas basadas en actuar como diferentes personajes: “(el teatro) permite a los individuos explicar cómo se sienten y cómo piensan por medio de historias de otros personajes. Esto les da una libertad para que las personas digan cómo se sienten realmente”.


Por ejemplo, se les pidió a los niños que crearan una historia en común donde todos aportaran sus experiencias del día a día para imaginar el futuro de la ciudad. Frente a un libro abierto, los participantes pudieron eliminar la timidez mientras imaginaban el futuro de Lima a través de esas historias. Como menciona Luigi Valdizán, estas técnicas alternativas pueden obtener resultados en el contexto de una investigación científica: “La investigación puede también aplicar herramientas no convencionales como el teatro o el juego (…) a fin de evitar grupos de discusión donde todos quieren responder “correctamente”. El teatro puede brindar respuestas sinceras, particularmente en un contexto donde los participantes trabajan con personas que no conocen durante una sesión de dos horas”.


Así pues, estos talleres no solo recopilan información a través de las percepciones de los participantes. Como indica Tato García Guerra. “(esta) es una metodología que también conecta a las personas con muchas cosas positivas como el juego, el respeto por la participación del otro, el trabajo en equipo y la importancia de respetar lo que los otros piensan para crear una idea compartida sobre el futuro”. Las artes visuales también desempeñaron un papel durante los talleres, porque a través de sus dibujos los participantes informaron a los demás su visión de Lima en el 2040.


Hay varias lecciones aprendidas a partir de la aplicación de estas técnicas en el Asentamiento Humano “José Carlos Mariátegui”. Como señalaron Luigi, Camila y Tato, uno puede diseñar planes diferentes para estructurar las consultas para obtener la información que se necesita y planear dinámicas con un tiempo específico para su desarrollo. Durante las sesiones quedó claro que cada grupo maneja su tiempo de manera diferente, añadir esta experiencia es importante porque permite un mejor manejo del tiempo y optimizar las habilidades de facilitación.  Esta flexibilidad muestra que el uso del teatro y las técnicas del clown pueden ser exitosamente replicados en otras situaciones a un bajo costo. El siguiente paso consiste en sistematizar la información para informar las políticas públicas en los gobiernos locales al llegar a un grupo más amplio de ciudadanos.

Por: Andrea Huaranga